Pueblos Originarios
El pasado 8 de enero, en Temuco, el fiscal regional junto al subsecretario del interior y el director de la PDI, justificaban un asalto y la represión a las comunidades mapuches, por parte de efectivos policiales y de investigaciones, aludiendo un operativo en busca de supuestas armas, cultivos de drogas e investigación de homicidios, sin detener a ningún sujeto imputado, ni encontrar elementos o “utencillos” que probaran el violento despliegue militar y el operativo terrorista de estado, donde resulto muerto un efectivo de investigaciones en extrañas circunstancias, según declaró el hermano del policía fallecido.
En el wallmapu chileno, a la misma hora, se dictaba sentencia por el asesinato de Camilo Catrillanca, lonco ejecutado por la espalda a manos de efectivos policiales, mientras que en los mismos momentos, un ejercito de ocupación con helicópteros, tanquetas y mas de 800 efectivos policiales asaltaban seis comunidades de Ercilla y Temucuicui, destruyendo viviendas y golpeando ferozmente, a mujeres, ancianos y niños, con el fin de arrestar a la madre y la viuda del mártir mapuche asesinado, enfrente de su pequeña hija Wakolda Catrillanca, que ese día, cumplía 7 años y que junto a su familia se dirigía al juzgado para escuchar la sentencia contra los culpables del asesinato.
“El estado chileno y sus huincas declararon la guerra al pueblo mapuche. Los peñis solamente se están defendiendo de tanta represión histórica en el wallmapu, represión hacia el pueblo nación mapuche”, declaro el werquen de Temucuicui a los periodistas populares.
RedAcción
Desde las comunidades mapuche en resistencia, para RedAccion.